Pamela Gómez
5 diciembre, 2017
Paula Charme
5 diciembre, 2017

En 1997 se me diagnosticó una polineuropatía periférica de predominio sensitivo, la cual me ha generado dolor tipo ardor intenso y sensación de hormigueo en ambas piernas e inestabilidad, lo cual me dificulta mucho la marcha. Desde hace varios años estaba utilizando Lyrica en dosis de 375 mg para poder aliviar el dolor neuropático, obteniendo sólo una respuesta parcial al medicamento. En Marzo de 2014 comencé a asistir a sesiones de Crioterapia de Cuerpo Entero en Criosauna en Cryo Salud, lo cual ha sido de gran ayuda en mi recuperación. Después de la tercera sesión sentí una disminución significativa del dolor. Al mes y medio de tratamiento, el dolor y la sensación de hormigueo habían disminuido tanto que logré reducir la dosis de Lyrica a la mitad. Por motivos de vacaciones, suspendí por 15 días la terapia, y lofré mantenerme sin dolor durante los primeros siete días de ese periodo. Posteriormente regresó el dolor, el cual cedió una vez reiniciadas las sesiones de Crioterapia de Cuerpo Entero en Criosauna.

Actualmente asisto a las sesiones de crioterapia de cuerpo entero en criosauna tres veces por semana en promedio y, en vista de los buenos resultados obtenidos, estoy disminuyendo a un cuarto la dosis de Lyrica, lo cual me tiene muy optimista. Además, esto ha contribuido a mejorar mi estabilidad, por lo cual camino con menos dificultad, mejorando mi calidad de vida con cada día que pasa y cada nueva sesión de crioterapia.

Nos complace tu mejoría Patricia Cruz Herreros

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